ORIENTACION SECTORIAL DEL GASTO


La distribución sectorial del gasto público dio firmeza e impulso a la estrategia orientada a restablecer el crecimiento económico y a elevar los niveles de bienestar de la población. Para ello se privilegiaron los principales programas de desarrollo social y de fomento a la infraestructura productiva del país. De esta manera fue posible acrecentar y mejorar la oferta educativa, elevar la calidad de los servicios de salud, fortalecer las condiciones de vida en las áreas rurales y urbanas, extender la red carretera, garantizar el suministro de agua potable y la provisión de energéticos que requiere la planta productiva del país.


 

El gasto programable sectorial -que excluye las erogaciones de los Poderes Legislativo y Judicial, Organos Electorales y los Tribunales Agrarios y Fiscal de la Federación- ascendió a 397 mil 214.7 millones de pesos, monto superior en 5.4 por ciento real al registrado en 1995 y en 5.6 por ciento a la meta. La mayor atención brindada a los programas sociales y de inversión, se apoyó en el esfuerzo fiscal y la adecuada orientación de los fondos públicos. Así, los sectores de Desarrollo Social, Energético, Desarrollo Agropecuario y Recursos Naturales, y Comunicaciones y Transportes, concentraron 90.5 por ciento de los egresos, frente a 90.0 de 1995.

 

GASTO PROGRAMABLE EN CLASIFICACION SECTORIAL
  ( Millones de Pesos )



     1 9 9 5              1     9     9     6 Variaciones Respecto a:
C O N C E P T O P R E S U P U E S T O Presupuesto Original      1 9 9 5
    Ejercido Original Ejercido Importe % %  Real*
          T O T A L   1/ 286 263.9 376 046.6 397 214.7 21 168.1 5.6 5.4
Desarrollo Agropecuario y Recursos Naturales 22 998.8 32 212.3 30 315.4 (1 896.9) (5.9) 0.1
Medio Ambiente 688.5 5 671.2 1 303.3 (4 367.9) (77.0) 43.8
Desarrollo Social 152 152.5 201 162.8 205 038.9 3 876.1 1.9 2.3
   Educación 68 143.7 90 033.3 92 655.9 2 622.6 2.9 3.3
   Salud y Seguridad Social 62 875.3 81 684.9 81 350.1 (334.8) (0.4) (1.7)
   Laboral 656.0 2 018.1 898.4 (1 119.7) (55.5) 4.0
   Desarrollo Regional y Urbano 14 805.9 18 884.6 20 804.9 1 920.3 10.2 6.7
   Abasto Social y Nutrición 5 671.6 8 541.9 9 329.6 787.7 9.2 24.9
Comunicaciones y Transportes 15 237.9 18 335.2 23 855.2 5 520.0 30.1 18.9
Energético 67 359.2 83 014.8 100 552.0 17 537.2 21.1 13.4
Gobierno,  Seguridad Nacional  y Procuración        
  de Justicia 14 481.6 18 034.8 20 419.2 2 384.4 13.2 7.1
Administración y Servicios 13 345.4 17 615.5 15 730.7 (1 884.8) (10.7) (10.5)

*  Deflactado con el índice de precios implícito del producto interno bruto.
1/  Excluye el gasto correspondiente a los Poderes y  Organos Autónomos.
Por esta razón no coincide con el gasto programable total.
FUENTE: Dependencias del Gobierno Federal y Entidades del Sector Paraestatal de
Control Presupuestal Directo

 

Por su impacto en los niveles de bienestar de la población, el Sector Desarrollo Social concentró 51.6 por ciento del gasto programable. Ello implicó un crecimiento anual de 2.3 por ciento real y ampliaciones presupuestales sobre la meta de 1.9 por ciento. Al interior del Sector, la distribución de los recursos fue como sigue: Educación, 45.2 por ciento; Salud y Seguridad Social 39.7; Desarrollo Regional y Urbano, 10.1; Abasto Social y Nutrición, 4.6; y Laboral, 0.4 por ciento.

Con las erogaciones en Desarrollo Social fue posible expandir y mejorar la atención de los servicios públicos indispensables para la población. La matrícula de educación básica se incrementó en 0.9 por ciento respecto al ciclo escolar 95-96. En salud y seguridad social, se distinguen los alcances en el otorgamiento de consultas curativas externas, general y especializada, que crecieron a una tasa anual de 3.0 por ciento; la aplicación de vacunas 24.1; y el número de egresos hospitalarios 4.4 por ciento. En materia de agua potable y alcantarillado, se amplió su cobertura en beneficio de 2.6 y 1.9 millones de habitantes, respectivamente. A través de los programas de abasto social y nutrición se aumentó en 62.1 por ciento la población infantil beneficiada con la dotación de desayunos escolares, y en 29.1 por ciento el número de familias favorecidas con despensas.

El Sector Energético absorbió 25.3 por ciento del gasto sectorial, es decir, 1.8 puntos porcentuales por arriba de la participación observada un año antes. En términos reales, dicho monto representó un incremento anual de 13.4 por ciento, y con relación a lo previsto fue mayor en 21.1 por ciento, como resultado del impulso otorgado a la inversión asociada al desarrollo y explotación de campos petroleros, y a la generación de energía eléctrica, principalmente. Conviene destacar que la expansión de la infraestructura de generación, transmisión y distribución del fluido eléctrico se apoyó en el sistema de arrendamiento financiero, razón por la cual no se refleja en el flujo de efectivo del gasto de inversión.

Para el Desarrollo Agropecuario y Recursos Naturales se asignó 7.6 por ciento de las erogaciones programables. A precios constantes dicho nivel fue similar al reportado en el ejercicio precedente y comparado con el presupuesto original resultó inferior en 5.9 por ciento. El último resultado se vincula con las menores transferencias requeridas por BANRURAL y la reducción de los apoyos otorgados por ASERCA a través de PROCAMPO, debido a las desfavorables condiciones climáticas que incidieron en la disminución de la superficie sembrada en algunos granos básicos, como: maíz, frijol, trigo y soya. No obstante, mediante amplios esfuerzos de selectividad fue posible destinar importantes recursos a la ejecución de los programas concertados en el marco de la Alianza para el Campo y al impulso del proceso de descentralización del gasto federal. En igual sentido, fue relevante el aliento al desarrollo de la infraestructura hidroagrícola a través de la CNA. Como resultado de estas acciones, durante el año se incorporaron y habilitaron 58 734 hectáreas de riego, cantidad superior en 9.2 por ciento a la alcanzada un año antes; además, la producción de los diez cultivos básicos aumentó 8.5 por ciento con respecto a 1995.

Al Sector Comunicaciones y Transportes correspondió 6.0 por ciento del gasto programable sectorial, frente a 5.3 de 1995; ello implicó un crecimiento anual de 18.9 por ciento real y de 30.1 por ciento con respecto a su meta. El propósito expreso de incrementar los recursos destinados a la inversión en infraestructura carretera, da cuenta del dinamismo alcanzado. También se distingue el impulso brindado al desarrollo de proyectos carreteros concesionados.