LUIS MONTES DE OCA
1895 – 1958

Secretario de Hacienda
16 de febrero de 1927 al 30 de noviembre de 1928
Gobierno de Plutarco Elías Calles
1° de diciembre de 1929 al 4 de febrero de 1930
Gobierno de Emilio Portes Gil
5 de febrero de 1930 al 20 de enero de 1932
Gobierno de Pascual Ortiz Rubio



Nació en la ciudad de México en 1895. Se graduó como contador público por la Escuela de Comercio y Administración, y en 1924 fue nombrado Contralor General de la Nación, logrando imponer una buena organización a través de sistemas administrativos y moralidad.

Secretario de Hacienda del 16 de febrero de 1927 al 30 de noviembre de 1928, en la administración encabezada por el general Plutarco Elías Calles, Emilio Portes Gil y del general e ingeniero Pascual Ortiz Rubio.

Montes de Oca puso especial empeño en la reorganización de los servicios administrativos con el ánimo de que, al reagruparlos por funciones y modernizar los procedimientos de las labores cotidianas, funcionaran con mayor eficacia. Para el efecto se designó una comisión reorganizadora, con facultades para estudiar los problemas de administración interior de la Secretaría de Hacienda. Esta comisión consideró indispensable la expedición de una ley, de carácter constitucional, que delimitara la competencia fiscal de la federación, los estados y los municipios; igualmente la creación de la Ley Orgánica de la Secretaría de Hacienda, del Código Fiscal Federal y la revisión de todas las leyes, reglamentos y disposiciones vigentes, a fin de codificarlos. La idea era promulgar nuevas disposiciones para, finalmente poder integrar un cuerpo homogéneo y estable.

En 1928 creó tres nuevas dependencias: la Comisión de Presupuestos, la Oficina de Impuestos sobre Sucesiones y Donaciones, y el Departamento de Biblioteca y Archivos Económicos.

Asimismo, se dispuso la concentración de labores y prácticas similares por ejemplo, las de correspondencia, archivo, dibujo y servicio médico. La Casa de Moneda y la Oficina Impresora de Hacienda fueron reorganizadas en su carácter de talleres, sobre bases netamente industriales. En la Tesorería de la Federación se estableció un nuevo sistema de contabilidad y se puso en vigor el reglamento del mismo. En 1929 se anunciaron el estudio del Código Fiscal, la creación de una nueva ley aduanal y la unificación de los aranceles sobre la importación de artículos y productos  extranjeros.

Igualmente se realizó el estudio de la situación de las industrias minera, petrolera y de hilados y tejidos, así como la revisión de las leyes que regían el impuesto sobre la renta, el de alcoholes y los causados en forma de timbre. La ley aduanal que venía estudiándose y cuya expedición se había retardado por no estar definitivamente preparada la nueva tarifa de importación, entró en vigor el 1° de enero de 1930, una vez concluidos los estudios de ambos ordenamientos, en sustitución de la antigua Ordenanza General de Aduanas y de la anterior tarifa arancelaria.

El 30 de diciembre de 1930 se creó la Comisión de la Moneda. El 25 de julio anterior firmó un nuevo convenio con el Comité Internacional del Banqueros a favor de la consolidación y pago de la deuda exterior, que se redujo en un 45% de su valor nominal. Montes de Oca firmó el arreglo de la deuda de los ferrocarriles nacionales y realizó la reforma monetaria de 1931, que desmonetizó el oro; también promovió la creación de la Comisión Reguladora de Cambios. Renunció en 1932 a causa de una crisis política, habiéndose sucedido un cambio en las orientaciones económicas del gobierno.

Más adelante colaboró con Eduardo Suárez como Director del Banco de México, habiéndose hecho acompañar de personajes de gran talla dentro del entorno económico tales como Manuel Gómez Morín, Miguel Palacios Macedo y Luciano Wiechers. En 1936 el Banco de México se fortaleció con una nueva ley Orgánica, estableciéndose que la institución podía aceptar en firme algunos de los títulos de deuda que emitirá la federación pero bajo condiciones estrictas. Dice Ortiz Mena que Montes de Oca consiguió que se prohibiera a los bancos Agrícola y Ejidal utilizar el crédito del Banco de México. En sus años de funcionarios estimuló y dio apoyo económico a la Orquesta Sinfónica de México.

Años después estableció el Banco Internacional y una serie de instituciones y organismos afiliados a éste, como el Internacional de Capitalización y el Internacional Inmobiliario. En 1947 fue presidente de la Asociación  de Banqueros.

Además de realizar comentarios para diversas columnas periodísticas, fue autor de un estudio titulado La intervención del Estado en la actividad económica leído en la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística. Escribió otros artículos, como los titulados “Los agentes del destino”, Economía de Compulsión e Inflación y equilibrio presupuestal”, así como “El Banco de México ha sido reducto de sensatez en nuestras vicisitudes  económicas”, que apareció en El Universal  el 1° de septiembre de 1950. Falleció el 4 de diciembre de 1958.